Simulación del colapsó del Edificio Nuevo León en México el cual fue realizado por la Universidad de Kyoto, Japón en el año 2011.
El 19 de septiembre de 1985 a las 7:19 se registró en la Ciudad de México un sismo que tuvo un epicentro superficial a una profundidad de 15 km, desde las costas de Michoacán a 400 km de distancia hasta la Ciudad de México, con una magnitud Mw = 8.0. La teoría de las leyes de atenuación de las ondas sísmicas indican que entre más viajen esas ondas, su amplitud disminuye, pero llegando a la zona compresible del Valle de México las ondas sísmicas se vuelven a amplificar, dando como resultado que en 1985 en esa zona compresible el suelo se movió con un periodo dominante de alrededor de 2 segundos, lo anterior dañó a construcciones que tenían de 8 a 15 niveles de altura con un periodo natural de vibración de 2 segundos que coincidía con el del terreno compresible, dando como resultado severos daños y colapsos de ese tipo de estructuras en esa zona compresible. Cabe mencionar que el sismo del 19 de septiembre de 1985 además, generó un movimiento extrañamente armónico del terreno durante más de 2 minutos, generando que muchos edificios colapsaran, dejando una cifra oficial de alrededor de 10,000 personas fallecidas.
Observe en el vídeo de simulación que al momento en el cual el período del espectro de respuesta de 2 segundos se convierte en dominante, las fallas de corte en las columnas de concreto reforzado (color rojo), aumentaron significativamente, disminuyó la capacidad axial del edificio contra la carga de gravedad y finalmente se produjo el lamentable colapso.
Según la estación sísmica SCT cuyos datos se muestran a continuación, la aceleración inicial del terreno en suelo blando para el sismo de 1985 fue un poco mayor a 100 gals.
Aceleraciones experimentadas en las azoteas de edificios con diferentes alturas en las estaciones CU (suelo firme) y SCT (suelo blando) para los sismos del 19 de septiembre de 1985 (rojo) y 2017 (azul). 1 gal = 1 cm/s2. Las aceleraciones reportadas corresponden al promedio geométrico de ambas componentes horizontales del movimiento.
Referencias:
Boletín ESIA ZACATENCO IPN, "Edición 42, Septiembre - Octubre 2017
Nota Informativa del Instituto de Geofísica y del Instituto de Ingeniería de la UNAM, “Nota Informativa”, 23 septiembre 2017